Este complejo está en una tranquila zona rodeada de amplias zonas verdes, a solo 50 metros de la playa. A 2 kilómetros se encuentran el centro y el puerto de Cambrils, así como numerosos restaurantes que sirven marisco local y platos internacionales.
Pero los huéspedes interesados en probar la cocina local, no deben aventurarse más allá del restaurante del hotel, donde podrán degustar las delicias que prepara su jefe de cocina en un relajado ambiente.
También tiene una tienda donde comprar alimentos y otras cosas necesarias para cocinar en las cocinas bien equipadas de los bungalows y las villas.